Unai Simón se adelantó a los tiempos el pasado 24 de mayo cuando renovó su contrato como león hasta 2029. El meta de Murgia aseguró que le encantaría convertirse en el mejor portero del mundo siendo futbolista del Athletic, un equipo por el que siempre ha demostrado una fidelidad absoluta. “Estaré aquí hasta que el club quiera”, ha dicho en alguna ocasión.
Sus deseos tienen ahora muchos más visos de convertirse en realidad después de que el miércoles fuera nominado al Trofeo Lev Yashin como guardameta más destacado en la pasada temporada. “Me encantaría ser el mejor portero del mundo, pero también formar parte de este club. Creo que eso es algo muy ambicioso, a veces un poco locura, pero por intentarlo no perdemos nada”, dijo el alavés entonces a los medios oficiales de la entidad rojiblanca después de estampar la firma en su nuevo contrato.
El guardameta, que finalizaba su anterior vinculación en 2025, renovó por cuatro temporadas más sin cláusula de rescisión. Tiene el cuarto contrato más largo de la primera plantilla rojiblanca después de los de Sancet y Dani Vivian (2032) y Beñat Prados (2031). Paredes, Adama Boiro y Álvaro Djaló también finalizan en la misma fecha que el cancerbero internacional que se proclamó campeón de Europa el pasado 14 de julio junto a Dani Vivian y Nico Williams con la selección dirigida por el exleón Luis De la Fuente.
El conjunto de Valverde realizó una gran temporada 2023-24. Además del título del KO, fue quinto en la Liga y volverá a jugar en Europa después de seis años sin hacerlo. Los premios individuales siempre vienen de la mano del buen trabajo colectivo. Simón quiso destacar entonces lo conseguido el curso pasado: “Este es el camino que tenemos que seguir para poder conseguir cosas más grandes de las que venimos consiguiendo ahora, que no son pocas”.
El trofeo al que opta el cancerbero rojiblanco lleva el nombre del mítico Lev Yashin porque ha sido hasta el día de hoy el único portero en ganar el Balón de Oro al que opta el menor de los hermanos Williams. Hay una imagen icónica del ruso, apodado ‘La Araña Negra’, junto a Iribar y Ricardo Zamora en el centro del antiguo San Mamés. El Txopo consideraba a Yashin como su ídolo y tomó de él el jersey negro, la mítica indumentaria que distingue a los porteros del Athletic. Desde hace muchos años ejerce de maestro y ejemplo de los arqueros de Lezama, entre ellos Unai Simón, con el que se fundió en un fuerte abrazo después de que el alavés ampliara su estancia en el equipo.
Simón ganó en la pasada temporada el Trofeo Zamora al ser el menos goleado en los partidos que jugó. Encajó 33 tantos en 36 encuentros, por lo que acabó con un coeficiente de 0,91, un porcentaje mejor que el de sus dos principales competidores: Ter Stegen (Barcelona) y Alex Remiro (Real Sociedad). El Athletic no ganaba este galardón precisamente desde el Txopo en 1970. Anteriormente lo habían conseguido Gregorio Blasco (1929-1930, 1933-1934 y 1935-1936), José María Echevarría (1940-1941) y Raimundo Lezama (1946-1947).