Los funcionarios del Hard Rock Stadium de Miami defendieron el martes las medidas de seguridad implementadas para la final de la Copa América entre Argentina y Colombia, marcada por escenas de caos en la entrada y un retraso de 82 minutos.
“El Hard Rock Stadium ha albergado de manera segura cientos de eventos de clase mundial en sus 37 años de historia, incluidos Super Bowls, partidos de fútbol internacionales de primer nivel, Fórmula 1, NFL y fútbol American University, fechas de giras musicales principales y otros eventos globales”, han dicho encargados del estadio en un comunicado.
Antes del partido Argentina-Colombia, los movimientos de multitud obligaron a los servicios de seguridad a cerrar las puertas, retrasando el ingreso de los aficionados y el saque inicial, que se produjo con casi una hora y media de retraso. Según los organizadores, el caos se debió a los numerosos aficionados sin entradas que intentaron abrirse paso. Los aficionados que sufrían calor en medio de una densa multitud tuvieron que ser evacuados.
La Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) indicó que la seguridad del partido se organizó "de acuerdo a las decisiones tomadas por las autoridades del Hard Rock Stadium". Los representantes del estadio afirmaron que el protocolo había sido decidido por los servicios del estadio, la CONMEBOL y las autoridades locales. Y que se habían observado las recomendaciones de seguridad de la CONMEBOL.
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El caos de esta final ganada por Argentina por 1-0 sembró dudas sobre la adecuada organización del próximo Mundial que se disputará en 2026 en Estados Unidos, Canadá y México. La policía, con una fuerza de 800 agentes, dijo que arrestaron a 27 personas y las expulsaron del estadio esa noche.